A varias semanas de implementar medidas preventivas para protegernos del Covid-19, una de las principales acciones contra el contagio de esta enfermedad es lavarse las manos con jabón y agua por al menos 40 segundos, de acuerdo a la Organización Mundial de la Salud.
Por ello el agua, además de ser un recurso fundamental para la vida, se vuelve nuestro mejor aliado. Como parte de las medidas de prevención, en Veolia Aguascalientes hemos incrementado la concentración de cloro a 2.0 ppm, cumpliendo con los estándares de la normatividad vigente para garantizar que la comunidad hidrocálida la reciba limpia y segura, desde la tubería.
Pero, ¿por qué hay ocasiones en las que el agua no llega? Esto muchas veces se debe a factores externos a la operación del servicio, tales como, interrupciones en la energía eléctrica, misma que es indispensable para el funcionamiento diario de los pozos, desde que amanece hasta que anochece, ya que en Aguascalientes el 100% del vital líquido se extrae de más de 200 pozos a más de 280 metros de profundidad.
Otro factor es el vandalismo
El robo de piezas electromecánicas y cable de cobre, manipulación no autorizada de válvulas, sabotajes como incendios y cortes de energía intencionales, entre otros, no sólo perjudican el suministro de agua de los vecinos del sector, sino a miles de usuarios cada semana dejándolos vulnerables sin este recurso. Tan sólo en lo que va del año se han presentado más de 50 actos de vandalismo en la infraestructura hidráulica y en 2019, se registraron más de 150, afectando la prestación del servicio a cerca de 450 mil familias.
Con la pandemia del Covid-19 que nos perjudica a todos, hoy más que nunca es primordial buscar que el agua llegue a todos.
Con la recién puesta en marcha de su centro de monitoreo, Veolia detecta en tiempo real dichas afectaciones en el suministro de agua, enviando de manera inmediata cuadrillas para reparar los daños en la infraestructura y lograr que se restablezca el servicio. Sin embargo, resarcir estas averías puede llevar horas e incluso días, perjudicando a miles de familias hidrocálidas. Lo anterior sin tomar en cuenta los costos de las reparaciones, las cuales superaron los 10 millones de pesos, únicamente durante el año pasado.
Aunado a lo anterior, cabe mencionar que la región de Aguascalientes está catalogada como una de las zonas a nivel nacional con mayor estrés hídrico.
De acuerdo a estudios llevados a cabo por el World Resources Institute, ha dado a conocer que México se encuentra en el lugar 26 de 164 países con mayor estrés hídrico y a su vez Aguascalientes ocupa la 4ª posición a nivel nacional con una puntuación de 4.81 en una escala del 0 al 5. Sólo detrás de Baja California, Guanajuato y la Ciudad de México.
